Antesala de una consulta médica. Muchos pacientes a la espera de ser recibidos por el médico especialista. Sin embargo, el fotógrafo ha acotado, de entre todos ellos, una pareja, un hombre y una mujer de mediana edad que permanecen muy juntos, aunque en silencio. Ella, de faz bellísima y figura grácil, aparenta, sin duda, bastante menos edad de la que se podría calcular. Él, todo lo contrario, por el gesto grave, la mueca de autocontrol y el cuerpo un tanto encogido, aparece como un hombre envejecido, sometido a fuertes tensiones. En cambio, la expresión de ella, la atención que le presta, y una suave caricia de ánimo que hace, nos sugiere una belleza interior quizá superior a la que se ve a primera vista. Por ello, si nos fijamos más atentamente, la expresión de él también refleja un cierto alivio, una cierta seguridad en lo que podríamos definir como una «virilidad mutuamente sostenida», antes de enfrentarse al especialista en una de las enfermedades que amenazan directamente a la condición de varón.
Maravillosa descripción del amor…
En una pareja que se ama, por encima de todo, cualquier enfermedad que amenace al varón nunca terminará con la unión de su pareja. En la vida y en la muerte, ella le llevará “en la sangre”, y estarán unidos siempre, tanto si el varón “sobrevive” como si muere.
Gracias, Paloma. Cuando vi aquella pareja que me inspiró el comentario creí tener el privilegio de contemplar amor verdadero.
Besos. JM
Gracias, Julia. Tienes toda la razón: realmente, el amor es la mejor medicina contra la enfermedad y el dolor…
Besos. JM
Si, ahora el amor llama la atención, está en peligro de extinción.
Hemos borrado de un plumazo a Dios que es puro amor, así que no podemos desprender amor, deberíamos volver la mirada hacia Él, porque es la fuente de todo bien.
Mercedes Lillo
Bueno, Mercedes… tampoco sería yo tan pesimista. El amor siempre ha sido un valor vital para el género humano pero en peligro constante en todas las civilizaciones. En la nuestra, también: antes de la Biblia de los judíos, durante el gran dominio de ésta durante siglos y ahora que parece que el «materialismo» nos domina. Pero, al final, la gente que sabemos (o, al menos, queremos) amar seguro que lo salvamos.
Muchas gracias por escribir.
Excelente, tierno, sugerente y esperanzador. Me ha encantado, Jose María.
Gracias, amiga, por tu visita y tu comentario; me esfuerzo por ser tierno, sugerente y esperanzador: creo que este mundo nuestro, tan adusto, está muy necesitado de estos valores… Espero que sigas visitándome siempre que puedas. Un abrazo, JM.